En este post vamos a hablar de los aspectos que debemos tener en cuenta en la corrección de una sobremordida y su relación con el diseño de sonrisa.
Para corregir una sobremordida normalmente podemos realizar un movimiento vertical de los incisivos inferiores (lo que se conoce como intrusión) o un movimiento vertical de los incisivos superiores (lo que se conoce también como intrusión).
Cuando nos planteamos la corrección de una sobremodida no solo debemos tener en cuenta qué repercusión va a tener a nivel oclusal en el paciente, si no también qué repercusión van a tener esos movimientos verticales en los tejidos blandos y por consiguiente en la estética de la sonrisa.
En este caso que presentamos hemos decidido corregir la sobremordida sobre todo haciendo un movimiento de intrusión en la arcada superior. Fijaos en el aspecto que presentaba la paciente antes de iniciar su tratamiento.
De esa manera lo que hemos hecho es:
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- Mejorar la relación que hay entre los cuatro incisivos. Tal como se ve en la fotografía de inicio existe un gran escalón entre los incisivos centrales y los laterales. Al corregir la sobremordida haciendo una intrusión de los incisivos superiores centrales hemos disminuido el escalón que hay entre los incisivos centrales y laterales, mejorando la relación entre ellos.
- También hemos mejorado mucho la relación entre los labios y los dientes consiguiendo una mayor armonía.
Para conseguir hacer ese movimiento vertical del que hablamos necesitábamos crear espacio, ya que una de las claves de éxito de este caso está en el correcto desarrollo de la arcada. Esto quiere decir que hemos otorgado una forma correcta a la arcada que nos ha permitido hacer un movimiento vertical en la zona anterior.
Al haber desarrollado una correcta forma de arcada hemos conseguido diseñar una sonrisa mucho más llena, lo que se conoce como Full Mouth Smile. Al mismo tiempo, al aumentar la expansión de la arcada y el torque, hemos conseguido también disminuir y mejorar mucho la sonrisa gingival posterior.
En el resultado final, tal como se aprecia en la fotografía que adjuntamos abajo, hemos solucionado el problema oclusal y la sobremordida que presentaba la paciente. Además hemos conseguido diseñar una sonrisa llena y conseguir una perfecta relación labio-diente.
Este es un caso clínico preparado por el Doctor Diego Peydro